Algunas cuestiones que explicar antes del Fulham
Me costó. La verdad es que tardé bastante tiempo en escribir una nueva entrada en este blog. Los motivos son sencillos, no tenía nada que contar. Habrá quien piense en que la situación que atravesaba el Atleti en esos momentos me empujó a ello, pero, aunque seguro que influyó algo, no fue la principal razón. El asunto es que me di cuenta que este blog, lejos de ser una opinión personal, se estaba convirtiendo en un sitio donde sólo se podían encontrar crónicas del Atlético de Madrid y del Basket Puertollano, y sinceramente, viendo el nivel que tienen las crónicas de gente como Jose I. Fernandez (ver), Tomi (ver), el gran Fernando Sánchez Postigo (ver) y demás blogueros atléticos, pues me chirriaba un poco ver el blog así.
Por tanto, y tras ganas de ponerme de nuevo en marcha frustradas por diferentes motivos, me propuse retomar el blog, haciéndolo de otra manera, comentando tan solo mi opinión sobre lo que rodea al Atlético de Madrid, a la UDP (que palo ayer...), al Basket Puertollano, etc. Veremos si lo consigo y si dura. Si no es así, pues volveré a ese apartado de los lectores de blogs que tanto disfrutan leyendo lo que gente como los mencionados anteriormente escriben en sus bitácoras.
Un saludo a todos, y si alguien se ha sentido defraudado al entrar al blog y ver la falta de actualizaciones, mis más sinceras disculpas.
2 Comentarios.:
Hola amigo:
Me alegro de que sigas por aquí. Todas las opiniones son importantes y cada uno a su estilo todos lo hacemos por los colores rojiblancos.
Un saludo.
Don Ángel, no me jodas, tío, no me jodas.
Muchas gracias por los halagos por la parte que me toca, pero, como bien te ha dicho Don Julio, cualquier opinión es importante, y todo comentario engrandece y enriquece siempre que sea hecho desde el respeto y la educación.
Esto, por otro lado, no es una cuestión de defraudar a nadie o de no hacerlo. Tiene que ser simplemente algo que te guste hacer, te entretenga y te mole. MIentras tengas esa magia escribirás, vaya que si escribirás. Y cuando no tengas nada de decir haces muy bien en no exponerlo. No te lo tomes como una obligación, porque si no la magia se perderá, y eso sí que no mola nada.
Y sabes que me tienes entre tus fieles. Escribas, no escribas, siempre todas las semanas me daré una vueltecilla por tu casita. Porque me mola. Y punto.
Un abrazote, compañero. Estoy ya que no sé ni dónde meterme. Ojalá y acabe en tu cueva. Será una magnífica señal.
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