El partido tuvo poco de lo que escribir. Un Valladolid muy superior a un equipo empequeñecido, en el que el único que le echó garra fue Pernía (un jugador al que por cierto, no quería ver ni en el Puertollano de 2ªB) . Más ganas, más pasión, más profesionalidad, más fútbol en el equipo blanquivioleta y resultado corto.
Tras una malísima primera parte, donde ya fue milagroso que el Atleti se fuese con empate al vestuario, Leo colaboró con los pucelanos, dejando un balón tan franco como su apellido a Luis Prieto que remachó a la red. Poco después empataría el Atleti gracias a un tanto en propia puerta de García Calvo (gracias, viejo amigo). Pero a 10 minutos para el final, Pernía, posiblemente el peor jugador de primera división, cometía un absurdo y claro penalty sobre Goitom que Victor se encargaba de transformar. El Atleti apenas lo intentó en lo que quedaba y el público se hartó.
Y es que esa es la única nota positiva del partido. Por fin, el Calderón despertó y se quejó. Y sus gritos no fueron dirigidos a Aguirre, como era de esperar, fueron más arriba, al palco donde estaba Cerezo, uno de los verdaderos causantes de la crisis de identidad que vive el club. En la SER, Alcalá comentaba que nunca había visto así al coliseum colchonero, en una situación de tantos nervios. Cerezo tuvo que aguantar descalificaciones, insultos y demás lindezas, que no le debieron afectar demasiado, ya que tras el partido no dudó en marcharse a la entrega de los premios Goya.
Sin embargo, y aunque los verdaderos culpables no estan en el cesped, no puedo dejar pasar por alto la actitud de los jugadores del Atlético de Madrid. Personas que no demuestran ser profesionales,pese a sus sueldos, y que deberían pagar por ello. Y hoy voy a apuntar a uno de los no habituales: Diego Forlán. El charrúa lleva un mes muy malo, pero es que ayer, se le vió apático, fuera del partido y sin ganas de nada. Es una actitud imperdonable. Una cosa es ser un Pernía de la vida, que no das para más, pero el hecho de no darlo por no querer, es muy grave y se deberían tomar medidas.
Ahora a esperar lo que depara la semana, aunque supongo que pasará lo de siempre, o Aguirre se queda porque hay que mantener la calma, o Aguirre a la calle. No caerán los que tienen que caer, eso tenerlo por seguro.
PD: Posiblemente, el Domingo que más deporte he visto de mi vida. En este orden: final de Australia, Memphis-Lakers, Jazz-Portland, Atléti-Valladolid y Raptors-Magic. Y para acabar, la superbowl escuchando el Carrusel de la SER, aunque la verdad, en la radio no se habló demasiado de fútbol americano (pero me sacaron varias sonrisas...).